Hoy culminamos los 120 km hasta la Catedral y abrazamos al Apóstol Santiago, cumpliendo mi voto de Caballero de la Orden del Camino de Santiago. Gracias a mi hija Tannia Quirola por su formidable compañía. Al Gran Mestre Miguel Pampin. A Alejandro RubinCarballo. A Emma González. A mi esposa Pilar Medina por su apoyo incondicional y permitirme vivir esta aventura fantástica.